Hoy. Poseedor de una maquina que puede correr el Photoshop con miles de pinceles que no uso (solo uso el circulo, así me va obviamente) , el juego de las escondidas con motosierras protagonizado por Travolta (Gears of War) y el otro que te dice que de todos los homosexuales vos sos lo maximo (Crysis y su precioso nanotraje que dice "Maximum Homo"). LLega el momento de conocer al espadachín canoso del lago.
Acordamos en encontrarnos en el Oso Peludo, que es una posada no un boliche gay. Llego un poco mas temprano de lo que acordamos para agarrar una buena mesa y de paso conocer un poco el lugar mientras lo espero.
El sitio es muy oscuro pero al mismo tiempo acogedor. En el se juntan jugadores de poker con dados que se preguntan "¿como le digo a mi mujer...(¡RorororoRodrigooo!) que me cague toda la plata?, borrachos que en la tarde cuando recuperen la conciencia se preguntaran como carajo se chuparon toda esa guita, boxeadores que no van a recuperar nunca sus dientes, viajeros, vecinos del Barrio de los Templos y vendedores de la mejor merca de la región. Todos ellos, con un par de jarras de cerveza de Wyzima (o lo que nos sirvan, da igual) encima, terminan siendo todos iguales. Con un proposito para quedarse que luego se deforma y se convierte en lo que todos conocemos como "vida".
Por fin llega el canoso del lago. A pesar de que estaba en una mesa en la no se podía ver la entrada (columna de mierda me tapa casi todo) me di cuenta que había entrado porque el brillo de su pelo casi podia iluminar el salón. El tipo da unos pasos, y los ojos del lugar no paran de seguirlo. Logro verlo (de nuevo, columna de mierda) y levanto la mano llamándolo.
El buen hombre se llama Geralt. Comparte la profesión de Van Hellsing y los problemas de Wolverine. Es un brujo, un cazador de monstruos, que no recuerda mucho de su pasado por un incidente que termino con su muerte. Desde entonces lleva una gran duda existencial que trata de sacarse de encima conversando con personas que lo conocieron o lo escucharon. El supone que de esta conversación quizás saque algo.
Comemos, jugamos unas partidas de poker con dados, competimos para ver quien se pone en pedo primero y termina cayendo ridículamente en un duelo de tragos (obviamente el gano). Luego trata de recuperar algo del dinero que perdió conmigo en los dados luchando con algún boxeador del lugar. Termina venciendo a absolutamente todos a pesar del alchohol que llevaba encima (el mareo y la suerte quizás le otorgaron unos movimientos únicos a la hora de esquivar golpes)
Se hace tarde. Le pido una habitación para pasar la noche a la escotada camarera, Geralt me dice que talvez lo encuentre en el cementerio por el mediodía y parte rápidamente hacia la ciénaga antes de que el barquero se vaya a dormir. Me voy a dormir pensando de qué manera lo voy a encontrar en el cementerio.
Es de mañana, hace frió y esta lloviendo. La bella música que proporcionaba Jaskier, las carcajadas, el ruido del encuentro de varias jarras de vidrio, los gritos de alegría y las puteadas desaparecieron. Ahora solo hay sangre, vomito y dientes en el piso, y en la cabeza una intensa y espesa resaca.
Me siento en una mesa y le pido algo caliente a la camarera para calmarel frió. Lo toma como un intento de seducción que rechaza porque el posadero es un poco celoso. Aprovecho la confusión para hablar acerca de Geralt. Me dice que no lo conoce mucho, que también intento seducirla y que pasa de vez en cuando para ganarse unas monedas y meditar. Comenta que lo ve muy seguido hablando con una enfermera del hospital de pelo rojizo.
Me dirjo al hospital. En el camino veo a matones reunidos, gente orinando, un tipo comenta como llueve sobre mojado refugiado bajo un techo de una casa mientras mira el suelo.
Cerca de la entrada del hospital escucho un importante parloteo por parte de una mujer, debe ser la típica vecina que conoce todos los secretos del barrio (y los que no conoce los inventa). Tirado en una pared meada presto atención a los chismes que suelta. Entre quejas por robos y asesinatos entre humanos y no humanos resalta con entusiasmo la llegada del brujo al Barrio de los Templos.
Decido dar por terminada la escucha porque la mujer comienza a dar detalles de aventuras sexuales con el espadachin canoso (y canoso en todos lados segun "la dama") y por un cráter cerca del jardín del hospital que llama mi atención. Llego al lugar y una enfermera que ocultaba sus penas en la puerta trasera del hospital me comenta que ahí vivía un alquimista. Tenía una pequeña cabaña que una noche estallo. No sabe si el hombre logro sobrevivir a la explosión. Le iba a preguntar por la chica de pelo rojo pero notaba que ya era mediodía. Tenia que encontrarme con Geralt.
En la entrada del cementerio veo al sepulturero durmiendo la siesta, aprovecho para escabullirme por la puerta sin que se de cuenta. Lo primero que veo es una gran iglesia en ruinas en el centro del terreno y me dirijo hacia ella. En el camino encuentro un cadáver, el sepulturero decidio dejarlo para mas tarde. Llego a la iglesia y me topo con un monstruo que disfrutaba de su merienda, otro tipo que dejo para mas tarde el sepulturero.
El monstruo resulto ser muy amable e inteligente así que le pregunte si había visto al brujo. Quitándose las sobras de los dientes con un hueso del cuerpo que devoraba me dijo que se metió en la cripta.
Apenas termine de bajar las escalareas que llevan al primer salon de la cripta me di cuenta que la luz no llegaba a cubrir ni la mitad de lugar. En los pasillos, en lo alto de algunas paredes, inalcanzables antorchas brindan una leve esperanza iluminando un poco la total oscuridad de la cripta.
Los ruidos, quejidos, el viento y la respiracion de otras criaturas recorren todo el lugar, al igual que los murcielagos. Un leve estremecimiento en el suelo frena mi paso y acelera mi ritmo cardiaco. Se escucha el gruñir de una criatura cerca del suelo, como si saliera del piso. Luego de eso solo escucho el derrumbre de una pared seguida de una rafaga de viento y una gran ola de fuego que cubre todo el pasillo y a la criatura, convirtiendola en un herramienta para iluminar el lugar. Veo al brujo detrás del monstruo, veo la sangre que desprende pero nunca llegue a ver los movimientos del brujo, fue demasiado veloz (o estaba demasiado oscuro, o estaba muy cagado). Cae la criatura, cubierta en llamas y sangre, y seguimos a los murcielagos a la salida.
Salimos de la cripta y a Geralt se lo ve tan tranquilo como cuando cruzo la puerta del Oso Peludo. Mientras recupero la respiración el brujo se va del cementerio. Se dirige a la laguna que esta afuera del Barrio. Lo sigo hasta que se detiene en la orilla de la laguna y se queda mirando el atardecer. Pero esta vez la postal es diferente, todo esta mas definido y el brujo lleva otro peinado. Todo se ve diferente. Lo veo a el y digo: "puta madre, no lo voy a conocer nunca".
Acordamos en encontrarnos en el Oso Peludo, que es una posada no un boliche gay. Llego un poco mas temprano de lo que acordamos para agarrar una buena mesa y de paso conocer un poco el lugar mientras lo espero.
El sitio es muy oscuro pero al mismo tiempo acogedor. En el se juntan jugadores de poker con dados que se preguntan "¿como le digo a mi mujer...(¡RorororoRodrigooo!) que me cague toda la plata?, borrachos que en la tarde cuando recuperen la conciencia se preguntaran como carajo se chuparon toda esa guita, boxeadores que no van a recuperar nunca sus dientes, viajeros, vecinos del Barrio de los Templos y vendedores de la mejor merca de la región. Todos ellos, con un par de jarras de cerveza de Wyzima (o lo que nos sirvan, da igual) encima, terminan siendo todos iguales. Con un proposito para quedarse que luego se deforma y se convierte en lo que todos conocemos como "vida".
Por fin llega el canoso del lago. A pesar de que estaba en una mesa en la no se podía ver la entrada (columna de mierda me tapa casi todo) me di cuenta que había entrado porque el brillo de su pelo casi podia iluminar el salón. El tipo da unos pasos, y los ojos del lugar no paran de seguirlo. Logro verlo (de nuevo, columna de mierda) y levanto la mano llamándolo.
El buen hombre se llama Geralt. Comparte la profesión de Van Hellsing y los problemas de Wolverine. Es un brujo, un cazador de monstruos, que no recuerda mucho de su pasado por un incidente que termino con su muerte. Desde entonces lleva una gran duda existencial que trata de sacarse de encima conversando con personas que lo conocieron o lo escucharon. El supone que de esta conversación quizás saque algo.
Comemos, jugamos unas partidas de poker con dados, competimos para ver quien se pone en pedo primero y termina cayendo ridículamente en un duelo de tragos (obviamente el gano). Luego trata de recuperar algo del dinero que perdió conmigo en los dados luchando con algún boxeador del lugar. Termina venciendo a absolutamente todos a pesar del alchohol que llevaba encima (el mareo y la suerte quizás le otorgaron unos movimientos únicos a la hora de esquivar golpes)
Se hace tarde. Le pido una habitación para pasar la noche a la escotada camarera, Geralt me dice que talvez lo encuentre en el cementerio por el mediodía y parte rápidamente hacia la ciénaga antes de que el barquero se vaya a dormir. Me voy a dormir pensando de qué manera lo voy a encontrar en el cementerio.
Es de mañana, hace frió y esta lloviendo. La bella música que proporcionaba Jaskier, las carcajadas, el ruido del encuentro de varias jarras de vidrio, los gritos de alegría y las puteadas desaparecieron. Ahora solo hay sangre, vomito y dientes en el piso, y en la cabeza una intensa y espesa resaca.
Me siento en una mesa y le pido algo caliente a la camarera para calmarel frió. Lo toma como un intento de seducción que rechaza porque el posadero es un poco celoso. Aprovecho la confusión para hablar acerca de Geralt. Me dice que no lo conoce mucho, que también intento seducirla y que pasa de vez en cuando para ganarse unas monedas y meditar. Comenta que lo ve muy seguido hablando con una enfermera del hospital de pelo rojizo.
Me dirjo al hospital. En el camino veo a matones reunidos, gente orinando, un tipo comenta como llueve sobre mojado refugiado bajo un techo de una casa mientras mira el suelo.
Cerca de la entrada del hospital escucho un importante parloteo por parte de una mujer, debe ser la típica vecina que conoce todos los secretos del barrio (y los que no conoce los inventa). Tirado en una pared meada presto atención a los chismes que suelta. Entre quejas por robos y asesinatos entre humanos y no humanos resalta con entusiasmo la llegada del brujo al Barrio de los Templos.
Decido dar por terminada la escucha porque la mujer comienza a dar detalles de aventuras sexuales con el espadachin canoso (y canoso en todos lados segun "la dama") y por un cráter cerca del jardín del hospital que llama mi atención. Llego al lugar y una enfermera que ocultaba sus penas en la puerta trasera del hospital me comenta que ahí vivía un alquimista. Tenía una pequeña cabaña que una noche estallo. No sabe si el hombre logro sobrevivir a la explosión. Le iba a preguntar por la chica de pelo rojo pero notaba que ya era mediodía. Tenia que encontrarme con Geralt.
En la entrada del cementerio veo al sepulturero durmiendo la siesta, aprovecho para escabullirme por la puerta sin que se de cuenta. Lo primero que veo es una gran iglesia en ruinas en el centro del terreno y me dirijo hacia ella. En el camino encuentro un cadáver, el sepulturero decidio dejarlo para mas tarde. Llego a la iglesia y me topo con un monstruo que disfrutaba de su merienda, otro tipo que dejo para mas tarde el sepulturero.
El monstruo resulto ser muy amable e inteligente así que le pregunte si había visto al brujo. Quitándose las sobras de los dientes con un hueso del cuerpo que devoraba me dijo que se metió en la cripta.
Apenas termine de bajar las escalareas que llevan al primer salon de la cripta me di cuenta que la luz no llegaba a cubrir ni la mitad de lugar. En los pasillos, en lo alto de algunas paredes, inalcanzables antorchas brindan una leve esperanza iluminando un poco la total oscuridad de la cripta.
Los ruidos, quejidos, el viento y la respiracion de otras criaturas recorren todo el lugar, al igual que los murcielagos. Un leve estremecimiento en el suelo frena mi paso y acelera mi ritmo cardiaco. Se escucha el gruñir de una criatura cerca del suelo, como si saliera del piso. Luego de eso solo escucho el derrumbre de una pared seguida de una rafaga de viento y una gran ola de fuego que cubre todo el pasillo y a la criatura, convirtiendola en un herramienta para iluminar el lugar. Veo al brujo detrás del monstruo, veo la sangre que desprende pero nunca llegue a ver los movimientos del brujo, fue demasiado veloz (o estaba demasiado oscuro, o estaba muy cagado). Cae la criatura, cubierta en llamas y sangre, y seguimos a los murcielagos a la salida.
Salimos de la cripta y a Geralt se lo ve tan tranquilo como cuando cruzo la puerta del Oso Peludo. Mientras recupero la respiración el brujo se va del cementerio. Se dirige a la laguna que esta afuera del Barrio. Lo sigo hasta que se detiene en la orilla de la laguna y se queda mirando el atardecer. Pero esta vez la postal es diferente, todo esta mas definido y el brujo lleva otro peinado. Todo se ve diferente. Lo veo a el y digo: "puta madre, no lo voy a conocer nunca".
3 Participantes del concurso de puteadas:
Imposible! Ja ja ja me cagué de la risa, un placer leerte de nuevo! Ya pensé que nunca más actualizarías tu blog!
Y nunca mas lo voy a actualizar por tres razones y otras que son tímidas y no se quieren mostrar (yo le digo frígidas)
La primera: el lobo es pura facha, no da para cargarlo.
Segunda: mi mamá no me deja (exactamente dijo que dejara que perturbar mentes, o me iba a convertir en algo mas nocivo que Tinelli)
Y la ultima: perdí todos mis dedos en una apuesta. Esto lo escribí pulsando las teclas con un lápiz que sostengo con la boca (tarde horas en escribir este comentario. Date una idea de lo que tardaría en escribir toda una entrada)
PD: ¿Existe un lugar en donde no estes? ¿Existe un antivirus que nos proteja de tu presencia?
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